DECESOS,
SEGURO
En un momento de pérdida, ya es suficientemente difícil sin complicaciones adicionales. Tras el fallecimiento de un ser querido, los trámites burocráticos y los procesos previos a la inhumación o incineración pueden resultar especialmente abrumadores, dada la carga emocional que conlleva la situación. En momentos así, la ayuda de un equipo de profesionales que se encargue ágil y eficientemente de todas las gestiones con una simple llamada puede ser invaluable. Un seguro de decesos puede cubrir todos estos gastos y trámites.
Según datos proporcionados por UNESPA a través de su portal «estamos seguros«, actualmente en España hay 24 millones de personas aseguradas de esta manera, lo que representa el 51% de la población. Es decir, más de la mitad de la población en el país cuenta con un seguro de decesos.
Cuida de tus seres queridos incluso cuando ya no estés presente y alivia todas las preocupaciones posibles contratando un seguro de decesos que facilite las cosas para aquellos que más amas.
Este seguro ofrece asesoramiento psicológico tras el fallecimiento, traslado del difunto tanto a nivel nacional como internacional, y asistencia jurídica en caso de fallecimiento o invalidez.
En Mínguez Sáez colaboramos con una amplia gama de aseguradoras para ofrecerte un servicio personalizado que te permita encontrar el seguro de decesos que mejor se adapte a tus necesidades. No dudes en consultarnos. Con nosotros, estarás seguro en todo momento.
Nosotros siempre recomendamos:
Nos gustan las cosas muy claras por eso siempre explicamos las cosas de una forma sencilla y directa.
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Este tipo de prima se caracteriza por ser revisada cada año antes de la renovación de la póliza y sufre variaciones debido a la probabilidad mayor de fallecimiento a medida que el asegurado cumple años. Para las personas jóvenes es la prima + económica pero a la larga suele ser menos rentable conforme el asegurado va cumpliendo más edad. Ya que el cálculo de la prima -visto de forma simplificada- es proporcional a la probabilidad de que ocurra el fallecimiento.
La prima nivelada es una modalidad en la que la cuantía de la prima se mantiene estable durante toda la vida de la póliza, lo que supone una prima elevada en los primeros años en comparación con la modalidad anterior pero que se convierte en una prima baja a medida que aumenta la edad del asegurado, sobre todo como en comparación con la prima natural donde en edades más avanzadas resulta más económica si se contrata con antelación.
La prima mixta mezcla lo bueno de ambas primas (natural y nivelada). De forma genérica se trata de una prima natural durante un número de años y al llegar una determinada edad la tarifa se «bloquea» para que no siga incrementando el precio.
Los gastos de inhumación dependen de cada localidad o municipio pero, por norma general, suelen ser más económicos por lo que para tener acceso a la incineración puede ser necesaria su inclusión expresa en la póliza o aumentar el capital de cobertura para evitar quedar cortos de capital.
Con carácter estándar las compañías incluyen el alquiler de un nicho por un tiempo determinado (dependiendo de cada localidad), existiendo la posibilidad de contratar en póliza la adquisición de fosa en propiedad o bien un nicho a máxima temporalidad (normalmente 25 años).
La garantía de accidentes es un complemento muy común en las pólizas de decesos donde se incluye de forma adicional un capital tal y como ocurre en los seguros de accidentes mediante el cual la familia del asegurado cobrará ese capital si el fallecimiento se ha producido a consecuencia de un accidente de cualquier tipo.
Esta garantía, da acceso a un cuadro médico concertado por la compañía donde los asegurados se benefician de algunos servicios sin costes y otros con precios exclusivos. No es, en ningún caso, un sustitutivo de un seguro de salud pero puede ser un buen complemento si quieres tener una cobertura extra por menos dinero.
El servicio dental que se incluye en algunas pólizas de decesos es muy similar a lo que sería una póliza dental específica. Funciona con un cuadro de franquicias y algunos servicios incluidos sin costes donde los asegurados pueden acudir siguiendo el cuadro designado por la compañía.
Mediante esta garantía podrán solicitar la tramitación de la baja en todos los perfiles sociales en los que el fallecido tuviera presencia de una forma segura y legalmente efectiva y recopilando toda la información en soporte digital para su entrega.
Este servicio permite a los asegurados la redacción de su testamento recibiendo asesoramiento jurídico en todo momento así como la redacción del documento y posterior envío a un notario para finalizar el procedimiento de forma fehaciente.
Preguntas frecuentes (FAQs)
A grandes rasgos, se trata de una póliza que contrata el futuro fallecido para que sus familiares y amigos no tengan que correr con los gastos que suponga su defunción.
Si analizamos en qué consiste un seguro de decesos, hemos de destacar los gastos que conlleva generalmente un fallecimiento y que entran dentro de las coberturas de éste:
- Gastos funerarios del sepelio, entre los que sobresalen la posibilidad de servicios religiosos, el ataúd, las coronas, las esquelas, las sepulturas, lápidas, nichos…
- Traslados. Este apartado se refiere tanto a los medios de transporte del finado (coche fúnebre) como a los de los acompañantes.
- Repatriación. Los costes de repatriar un cadáver son altos y el seguro de decesos supone una solución idónea para afrontarlos con antelación.
- Incineraciones. Es un tipo de ritual fúnebre que cada vez cuenta con más partidarios y cuyos gastos también están cubiertos por el seguro de decesos.
- Trámites administrativos. Son papeleos de carácter legal y formal que los responsables de la aseguradora nos quitan de encima en unos momentos complicados.
- Asistencia a nivel de gestoría. En este caso, se trata de documentos que tienen que ver con los derechos y responsabilidades relacionados con un fallecimiento.
- Otros servicios complementarios como asistencia telefónica, asistencia en viaje o asistencia pedagógica en casa.
Si la persona afectada contaba con un seguro de decesos, debes localizar el contrato y el número de póliza para tener en cuenta a qué garantías puedes acceder. Según la compañía y el producto contratado puedes organizar un entierro adaptado a los deseos del difunto, solicitar el servicio de tanatorio y acceder a la incineración a inhumación en nicho o sepultura, así como a la lápida.
Todos podemos contratar un seguro de decesos aunque, generalmente, cuanto mayores seamos, mayor será la prima final, ya que el riesgo que asume la compañía es más elevado. Sin embargo, dependiendo del tipo de producto elegido puede existir una edad límite de contratación, que puede estar establecida entre los 65, 70 u 80 años, entre otras, o incluso puede existir una edad mínima de contratación, como ocurre en el producto de pago único, que no es contratable para personas menores de 65 años.
Depende de la compañía y aún dentro de la misma entidad aseguradora puede depender de las características particulares y personales del titular del seguro.
La edad o el sexo de la persona que vaya a contratar la póliza pueden determinar si es necesario un reconocimiento médico para contratar un seguro de decesos o no lo es.
No existe una norma única ni una pauta común, por lo que en principio, lo recomendable es que el interesado antes de contratar pregunte sobre si es necesario un reconocimiento médico para contratar un seguro de decesos en el que se encuentre interesado.
Lo más habitual es que no sea necesario pasar un reconocimiento médico por parte del titular de un seguro de decesos; sin embargo, sí es común que la compañía sustituya el examen médico por:
- Un cuestionario médico escrito general y firmado por el titular.
- Un cuestionario telefónico sobre estado de salud
- Una declaración firmada del estado de salud
La entidad aseguradora está obligada a reembolsar el capital no consumido en la gestión del deceso.